Huelva rinde homenaje al escultor Antonio León Ortega cuando se cumplen 105 años de su nacimiento con un monumento a tamaño real realizado por Alberto Germán Franco que refleja fielmente la forma de trabajar de León Ortega en un diálogo permanente con su obra. Este monumento ha sido posible gracias al esfuerzo de la Asociación Promonumento al escultor, que comenzó su andadura en el centenario de su nacimiento para hacer realidad este sueño, y a la colaboración de diferentes instituciones. La obra estará expuesta en la Universidad de Huelva hasta su baño en bronce y su posterior exposición en las calles de la ciudad.
Antonio León Ortega trabajó durante 50 años en Huelva, desde su antiguo taller de la calle San Cristóbal y desde el de la calle Buendía. Allí desarrolló una intensa labor escultórica y de imaginería que hace que en la actualidad sus obras se cifren en casi 500. A éstas se suman las nuevas obras que aparecen constantemente fruto de la investigación en su trabajo. Entre ellas se encuentra el 80% de las imágenes procesionales de Huelva capital. Y León Ortega no es sólo importante para Huelva, sino muy especialmente para la Semana Santa de Huelva.
El objetivo de la relación del monumento es proyectar todo lo que supuso León Ortega y su trabajo y acercarlo a los onubenses. Para ello, el escultor Alberto Germán Franco quiso recoger la esencia de ese día a día en el taller esculpiendo, y lo hizo como era León Ortega: “Un escultor que hablaba con su obra, que creía en ella y dialogaba con ella”. Así, el monumento muestra al escultor en pleno trabajo, observando a su obra aún inacabada, a medio camino entre la madera y el barro, y tocándole el pecho al Cristo en una muestra de fe.
